Luis Alberto Crespo
Nota y selección de Giordana García Sojo
Editora de Literatura Venezolana Abisinia Review
Ofrecemos una selección del más reciente libro del poeta Luis Alberto Crespo, Sólo de más allá, que será publicado próximamente por el fondo editorial Fundarte. En este libro el poeta pespuntea una centena de poemas breves donde rigor, aridez y sequía continúan siendo temáticas persistentes de su universo simbólico; pero esta vez, en Sólo de más allá, se denota la actitud contemplativa del yo poético en diálogo consigo mismo, un diálogo que no busca respuestas ni más preguntas, más bien pareciera asentir con devoción y respeto ante la naturaleza y su metafísica absoluta. Acaso en «lo recio» está la verdad final, esa vereda perdida en «lo indistinto», entre el monte absoluto que esconde la muerte, y su siempre posible redención en la palabra y la sensualidad.
Sólo de más allá
(selección)
…
Yo digo monte
y enseguida se aglomera lo indistinto.
…
Nos criaron unas tierras flacas
¿No oyes? Es como si de allá te gritaran
Somos iguales
a lo que se estira en cualquier parte sonando
Duramos sobre lo que se arrima y se amontona
Se nota en nosotros el penacho del humo
parientes de unos muñones
y unos lados torcidos a golpes
Venimos de esa parte a pedir hambre
en un pueblo con puyas
Hay raíces que nos remedan y si nos encuentran
nos encuentran solos de más allá.
…
El dolor es gran maestro
Sólo él
Me causa fiebre
el seguir adentro asomándome
¿Es así la poesía?
No es duro
Yo pasé por las curvas de San Pablo
los papeles con que escribo
Y sufro de ese lado
Me dan rabia las lágrimas
Me tropiezo me caigo me caigo.
…
Alguien quita estos palos de caudero
para calmar tus sentimientos
Alguien recoge tierra con los ojos
para que te alejes
Se tiñe el agua
con una pluma de matar tórtolas
Yo te ayudaría pero mejor no
Sería peor cosa ser.
…
Tú me hiciste así
Yo sueno igual que el jebe
cuando digo tu nombre
de degüello
Me sumo contigo
No uso ni dos palabras
recordándote
Las demás me las tragaba
La ensoñación y tú me han dejado
en esta casa de la voracidad blanca.
…
¿Eso lo hizo la ternura?
¿De verdad lo hizo?
¿Pero por qué ella?
¿Qué pruebas tienes?
Dejo esas plumas
regadas por toda la casa
En la mesa
me supo a su canto la comida.
…
Voy a ordenar estas tunas
Voy a cuidarlas
Juraré por ellas
Están muy afuera
Las hay que dudan
y florean
¿Cómo será su yo?
Eso déjaselo a los mártires.
…
Esa devoción por ladearse
que tiene lo inerte
En tus labios
sientes la lastimadura de las pendientes
Quiéreme así
a la luz que borbolla viva
Alcanzar el soplo de lo elevado
te endurece Te ha sucedido
Detrás de la mota de la ortiga
se curva cada clemencia.
…
………………………………al hermano en el polvo
Cómo alumbra el tizne en los ojos
cuando uno vuelve a casa
El aire nos hace más lentos
mientras nos acercamos
Mamá ¿por qué suena tanto la iglesia
bajo las maporas de la plaza?
¿Por qué las campanas sienten
y tú bajas los ojos al mirarme?
—Porque es hora de morir.
…
Ha caído otra hoja
entre los dos
se ha posado sobre nuestro pecho
y se inquieta
Nada la trajo
ni siquiera el arrugado afuera
Muestra una lastimadura en su costado
¿como nosotros
que nos pasamos
con la inmensidad?
…
La frescura del mentol en mi mano
sobre la frente
es como volver a casa
La sequía de mi mudez
es cuando digo su nombre
y chilla el tordo mirlo
pero el gesto de mi otra mano
sobre mi pecho
me da aquí en el crepúsculo.
…
El caujaro bastaba
para que pudiéramos yacer
y la casa comenzaba
una vez y otra vez y no volvía
entre los desperdicios
y tú no morías aún tú pasabas
Era el tiempo del fin
y Puse mi mano en tus ojos
como ahora
con tierra de pensar en ti.
…
Cómo se inquieta la luz
con el paso lento del cerval
entre las estrellas
Su cuerpo
se ha comido una paloma
Es oscura
como un pequeño planeta
Lejos entre las fauces sin vida
aún brilla allá arriba.
…
Los grillos abandonaron la casa
No quedó ni una silla siquiera
Tú corriste a buscar el cuchillo
para hablarle a los malos de las cabras
A ellos
les gusta eso
Te pusiste de acuerdo con las raíces
que ofrecen su nuca para que vivan las cosas
Huesos de árboles
andan regados como polvo endurecido
¿Qué buscas ahora?
Si es para entenderte con el dolor
esa verdad pura aquí es.
…
Vamos a morir ¿quieres?
Como se llamaban sopla en el viento
Oigamos a la tijúa Ella lo sabe
También tú caíste abatida No la escuchaste
Será nadie hacerlo como tú aquel día
el del mes más cruel en una cama tan flaca
pero anímate No te muevas
Sin nombre Así es un epitafio
¿La oyes en el caudero
el árbol del gólgota?
Yo sé qué pasará
Es allí allí en mitad de lo recio.
Luis Alberto Crespo (Carora, Venezuela, 1941). Poeta, guionista y ensayista. Ganador del Premio Nacional de Literatura. Ha dirigido espacios fundamentales para la preservación y difusión de la literatura venezolana como «Papel Literario» de El Nacional, la revista Imagen y la Biblioteca Ayacucho. Ha sido tallerista de Monte Ávila Editores y del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos. Presidió la Casa Nacional de las Letras Andrés Bello desde donde fundó el Festival Mundial de Poesía de Venezuela. Se desempeñó como Embajador de Venezuela ante la Unesco. Entre su amplia y reconocida obra se encuentran los libros Cosas (1968); Costumbres de sequía (1976, 2022); Señores de la distancia (1988); Mediodía o nunca (1989); Duro (1995); Al filo de la palabra (1997); Ninguno como la espina (2000); El país ausente (2004); …Y ya (2011, 2017), entre otros.
La composición que ilustra este paisaje de Abisinia fue realizada a partir de una obra del artista español © Juan Carlos Mestre