Alejandro Cortés
Los abismos del poeta colombiano Alejandro Cortés son el rock y la poesía, y así da cuenta su último libro publicado El álbum púrpura (La Raíz Invertida Editorial, Colombia, 2021). Cortes es también narrador, músico, editor, gestor cultural y director de talleres literarios. Es integrante de Grave Compañía, ensamble de poesía y rock experimental. Agradecemos la traducidos al inglés de Ron Riddell y Saray Torres
The Final Countdown
Oscila el espacio
algo viene o algo se va
Lo cierto es que son las tres y cuarenta
en un viejo reloj sobre las montañas de Suecia
No hay un conteo
sólo oscilaciones
El tiempo no se cuenta
pero sí se siente cuando nos arquea el cuerpo
Hay que salir de esta habitación con reloj
de este sobrevuelo de montañas
de este ruido acuoso de planeta
Siempre alegra un conteo
para marcar las últimas horas que haremos lo que ya estamos hartos de hacer
Oscila el trémulo del piano
y sigue vibrando
hasta su curva más alta
Luego
estalla un escenario
La elevación de la canción nos levanta los pies en saltos continuos
Estamos arriba
Joey Tempest canta las “o” de un coro espacial de bienvenida
Dejar la tierra da tanta tristeza como salir de la vida de una mujer azul
Hermosamente azul
Hemos vivido juntos tanto tiempo
que nunca nos imaginamos dar un paso fuera del otro
¿Eso es posible?
¿Es acaso el tiempo quien cuenta nuestros últimos pasos?
El espacio es una reproducción del vacío
De vez en cuando una estrella
un guijarro cósmico
un agujero negro
Espacio es la distancia insalvable entre dos manos hartas de estar unidas
Podemos explorar nuevos mundos
Podemos contar átomos fuera de la cápsula del comandante Tom
David Bowie lo hizo
Los átomos fueron un conteo de cabecitas negras sobre un pentagrama
que Joakim Larsson leyó y leyó
No hay aire fuera de nuestro lugar seguro
La gravedad se reduce al cordón umbilical
que ata a un astronauta a su nave nodriza
Si nada gravita nada flota
Si nada pesa nada es liviano
Un coro que advierte lo que está a punto de terminar
no es sólo un coro
es una letanía del espacio
donde un sintetizador pregunta y un humano responde
Y todos saltamos porque sentimos que nos vamos
Porque alejar los pies dos centímetros de la tierra
es acercar la frente dos centímetros a Marte
¿Será el Marte de Mick Mars?
¿Será la luna de Moonspell?
¿Será el Mercurio de Queen?
Europe puso los números finales para el despegue
Y allí estamos
solos
flotando entre nebulosas blancas y agujeros negros
sin motivación para movernos a ningún lado
Hace frío
Que nos muevan
Estamos solos
El invierno dura toda nuestra vida
Si al menos un disparo en la sien nos calentara las venas
Flotamos helados y solos sin la obligación de movernos
pero nos estamos congelando
En serio
hace frío
Las sombras se petrifican en el hielo
Un sintetizador al final del conteo
nos comprueba que realmente
nunca salimos de Suecia.
The Final Countdown
The space oscillates
something comes in or goes out
The truth is that it reads three-forty
on an old clock in the mountains of Sweden
There is no countdown
just oscillations
Time is not accounted for
but it does feel when our body hunches over
You must leave this room with the clock
of this flight over mountains
of this watery noise of the planet
Always bringing joy to the countdown
that signals the last hours of doing what we’re already tired of doing
The tremulous of the piano oscillates
and keeps vibrating
to the highest crescendo
Later with
the explosion of the stage
the song rising, lifts our feet continuously
We are up high
Joey Tempest sings the ‘o’ of a welcoming special chorus
Leaving earth is as sad as leaving the life of a blue woman
Beautifully blue
We have been together for so long
we never imagined stepping away from each other
Is that possible?
Is it time what counts our last steps?
Space is a reproduction of emptiness
Occasionally a star
a cosmic pebble
a black hole
Space is the unconquerable distance between two hands tired of being connected
We can explore new worlds
We can count atoms in Major Tom’s capsule
David Bowie did it
The atoms were a countdown of little black points on a pentagram
that Joakim Larsson read repeatedly
There is no air outside our safe place
Gravity comes down to the umbilical cord
that ties an astronaut to his mother ship
If nothing gravitates nothing floats
If nothing weighs nothing is light
The warning of a chorus about to end
it is not just a chorus
it is a litany of space
where a synthesizer asks and a human replies
And we all jump because we feel that we are leaving
Because moving your feet two centimetres from the ground
is bringing your forehead two centimetres closer to Mars
Could it be Mick Mars’ Mars?
Could it be Moonspell’s Moon?
Could it be Queen’s Mercury?
Europe has the final numbers for take off
And there we are
alone
floating between white nebulae and black holes
no motivation to move anywhere
It’s cold
Move us
We’re alone
Winter lasts all our life
If at least one shot to the temple warmed our veins
We are floating frozen and alone without the obligation to move
but we are freezing
Truly
it is cold
Shadows turn to ice
A synthesizer at the end of the countdown
confirms we never
left Sweden.
Lenguaje De Mi Piel
Te arrancan la lengua
te queda el silencio
El silencio no es una voz muerta
Es la lengua que traduce las ausencias
Entonces la piel habla
y dice con fuerza que esta no es su raza
Que sus dioses brotaron de la tierra
cantando antiguos alfabetos
Y se escucha América
como un viento de mar que une todas las velas
no sólo las de España
ni las anglosajonas que se apropiaron de esta palabra
América no es de ellos
América es una palabra huérfana
que nosotros conjugamos sudando
América es el galeón
que Elkin Ramírez intentó rescatar
desde el fondo de la piel de los americanos
Queda muy poco bajo la lluvia
y tanto abuso fuera del cuerpo
La piel tiende un camino hacia la noche
donde se danza con palabras extraviadas
Para escucharla
hay que volver a respirar.
………………………A la memoria de Elkin Ramírez (1962 – 2017)
Language of my skin
Language is removed
leaving silence
Silence is not a voice of death
but the language that translates absence
Then the skin speaks
in strong voice saying this is not its race
That its gods emerged from the land
singing the ancient alphabets
And America is heard
like the sea wind filling all the sails
not just the Spanish ones
nor the Anglo-Saxon who ruled this word
America is not theirs
America is an orphan word
that we conjugate sweating it out
America is the galleon
that Elkin Ramírez tried to rescue
from the skin of Americans
There is very little left in the rain
and so much abuse beyond the body
The skin is a path laid down into the night
with the dance of misplaced words
To listen to it
you must breathe again.
………………………In memory of Elkin Ramírez (1962 – 2017)
Angie
………………………With no lovin’ in our souls
………………………And no money in our coats
………………………You can’t say we’re satisfied
………………………Angie, The Rolling Stones
Angie
era la canción que no pudimos tocar en el colegio
y el nombre de la niña que nunca nos dio un beso
Por ella queríamos que nos saliera barba
Por ella intentamos tocar la guitarra
Por ella pintamos grafitis en el barrio
hasta darnos cuenta de que la vida es una lata gastada
que pierde el color de sus gritos cuando todavía tiene gas
Angie
Siempre pisamos la tierra bajo las mismas nubes
El amor en los bolsillos no nos llevó a ningún lado
Pateamos piedras de distintas avenidas
sólo para gastarnos los zapatos
Angie
No estoy satisfecho
La adolescencia se fue en los cuatro minutos treinta y nueve segundos
que duramos bailando tu canción
Luego fuimos un rodar de latas adultas
De piedras en el camino de alguien
que el azar fue pateando de tiempo en tiempo
hasta hacernos coincidir hoy
en este pequeño almacén
Angie
Estoy a punto de entrar
Voy a fingir que compro unos zapatos
tú vas a fingir que me los vendes
y ambos haremos como que no nos conocemos
Para tanto extravío
no bastan unos zapatos nuevos
Angie
Sonriamos
Poco importa si estamos satisfechos.
Angie
…………………..….With no lovin’ in our souls
………………………And no money in our coats
………………………You can’t say we’re satisfied
………………………Angie, The Rolling Stones
Angie
was the song we could not play at school
and the name of the girl we never kissed
She was the one we wanted to grow our beard for
She was the one we wanted to play the guitar for
She was the one we painted graffities in our neighbourhood
until we realised life is a wasted tin
that loses the colour of its cries still full of gas
Angie
We always tread the ground under the same clouds
Love in our pockets got us nowhere
We kicked stones away on various avenues
just to wear out our shoes
Angie
I am not satisfied
Adolescence gone in the four minutes thirty-nine seconds
we danced to your song
We were a rattle-tail of old tins
of stones in someone’s path
randomly stamped in from time to time
until we meet again today
in this little store
Angie
I am about to enter
I will pretend I am buying a pair of shoes
you will pretend you are selling them to me
and we will both pretend we know each other
To compensate for our loss
new shoes are not enough
Angie
Let’s smile, it doesn’t matter
if we can’t get no satisfaction.
Gypsy Road
Llevo puesta una camiseta de Cinderella
Pido una cerveza y una canción
Suena Gypsy Road
El camino es el hogar de un gitano
Por más que avance la carreta
la noche va del vacío a la nada
Luego suena Boney M.
Sus acetatos estaban en la casa de mi padre
en aquella época donde yo era One for rock and roll
y él padecía la ira
más que la diabetes
Suena Coming Home
Las canciones de Cinderella hablan de volver a casa
Supongo que Cenicienta siempre debe regresar
antes de que un sol de soldadura
sobre las latas de una moto
indique el sellamiento de la noche
¡Ah!
Le subieron el volumen a la canción de Boney M.
¿Cómo lidiará mi padre la soledad?
¿Con quién afrontará la amargura de su sangre dulce?
¿Conservará el espejo en el que se acomodaba su boina estilo AC / DC
y se afeitaba cada tercer día?
No somos muy distintos
Afeitarse
es ver la cara de mi padre
con una cuchilla en el cuello
Suena de nuevo Gypsy Road
Padre
nuestro hogar fue un cruce de caminos
Apagan la luz del bar
Para escribir me basta el resplandor de los neones
Ojalá que a mi padre
le baste el resplandor accidentado
del recuerdo que soy.
Gypsy Road
I am wearing a Cinderella t-shirt
asking for a beer and a song
“Gypsy Road” is playing:
The road is the home of a gypsy
No matter how far the cart advances
the night cannot go beyond emptiness
Later Boney M. is playing
on vinyls in my father’s home
in the days when I was One for Rock and Roll
and his complaint was more anger than diabetes
“Coming Home” plays
Cinderella songs are about coming home
I guess Cinderella must always go back
before the riveting sun
of the motorbike mechanics
that reveal the seizure of night
Ah!
Boney M. songs, the volume turned up
How will my father deal with loneliness?
Who will face the bitter-sweetness of his blood?
Will he keep the mirror where he adjusted his AC / DC beret
and shaved every other day?
We are not that different:
Shaving myself
is to see my father’s face
with a blade to his neck
“Gypsy Road” plays again
Father
our home was a crossroads
The bar lights go off
Neon lights are enough to write by
I hope the patchy glow of the memory of me
may be enough
for my father.
Home Sweet Home
Los sábados durante mi último año de colegio, recorría discotiendas en busca de música de Mötley Crüe. En un almacén del barrio Galerías encontré en acetato Dr. Feelgood, su álbum más reciente. Anduve las calles del centro, desde la diecinueve hasta la veinticuatro, y conseguí Girls, girls, girls también en acetato, Too fast for love y Shout at the devil en CD, y por encargo, después de dos meses de trámites de importación, Theater of pain en casete. Tan pronto lo tuve en mis manos lo metí al walkman. La quinta canción del lado A era mi favorita: Home sweet home. Me notó tan feliz el vendedor, que me regaló dos afiches de la banda. Mi papá los vio pegados en la pared de mi cuarto. Vio los acetatos. Los cedés. No entendió lo del maquillaje glam. No le gustó eso de gastarse la plata de las onces en música, como si la ausencia de música no dejara más vacíos que el hambre. Lo rompió todo, hasta la tarjeta del almacén de Galerías. Pasé el resto de sábados del bachillerato lavando las paredes de SU apartamento, escuchando en mi walkman el único casete sobreviviente y aprendiendo que Home sweet home, es una canción de despedida.
Home Sweet Home
On Saturdays during my senior year of high school, I scoured record stores in search of Mötley Crüe music. In a store in the Galerías neighbourhood, I found on the most recent Dr. Feelgood album on vinyl. I walked downtown from Nineteen Street to Twenty-four Street, and I got Girls, Girls, Girls also on vinyl, as well as Too Fast for Love and Shout at the Devil on CD; on request, after two months waiting for international shipping, Theater of Pain on cassette. The moment I had it in my hands, I put it in my Walkman. The fifth song on Side A was my favourite: Home Sweet Home. To my delight the seller had also given me two band posters. My father saw them pasted on my bedroom wall. He saw the vinyls. The CDs. He didn’t understand the glam makeup. He didn’t like wasting snack money on music, as if the absence of music wouldn’t leave more emptiness than hunger. He broke everything, even the loyalty card for the store in Galerías. I spent the rest of my high school Saturdays washing the walls of his apartment, listening to the only surviving cassette on my Walkman and learning that Home Sweet Home, is a farewell song.
Un hombre rudo camina como si estuviera en un videoclip de Guns N´ Roses
Hay hombres que pasean con pitbulls y rottweilers para verse rudos
Pero un hombre rudo
realmente rudo
enciende un cigarrillo mientras arrastra por la cola a un cocodrilo africano
Un hombre rudo camina como si estuviera en un videoclip de Guns N´ Roses
y al final se da el lujo de amedrentar a Axl Rose
Un hombre rudo tiene un nido de zarigüeyas en la rueda del hámster
y se afeita la barba con una barba de abejas
La casa de un hombre rudo tiene un puma sobre el tejado
un tiburón en la bañera
y pirañas en el agua de los baños
El garaje de un hombre rudo tiene una jaula de águilas calvas
que se alimentan de gatos
que se alimentan de canarios
que se alimentan de las tarántulas
que en cada esquina tejen una red
Un hombre rudo no es un tigre en la cama
Tiene un tigre en la cama al cual golpea antes de hacerle el amor a una mujer
y termina con un grito de diez segundos al estilo de You Could Be Mine
Un hombre rudo se abriga con bufandas de piel de boa
sin matar la boa
Y en venganza adánica la obliga a tragar manzanas
Cuando un hombre rudo saca la leche de la nevera
es porque en la nevera tiene a una búfala pariendo
Un hombre rudo camina descalzo sobre su alfombra de piel de oso
aunque el oso todavía esté usando esa piel
Un hombre rudo mira al miedo a los ojos
y hace que el miedo tiemble de miedo
Un hombre rudo tiene…
La casa de un hombre rudo tiene…
El garaje de un hombre rudo tiene…
Hollywood nos ha enseñado que la rudeza de un hombre
está en tener
Y no sé qué más decir de un hombre rudo
No conozco personalmente a ninguno
y creo que cualquier persona se alejaría de él
Excepto Chuck Norris
Porque Chuck Norris tiene un afiche de Schwarzenegger en su habitación
y ese sí que fue un hombre rudo
dentro y fuera de Hollywood
Él fue el gobernador más rudo que ha entrado a un salón de belleza en Texas
para que una mexicana que trabajaba quince horas diarias
sostenía a su familia y enviaba dinero a Guadalajara
una mexicana
realmente ruda
le arreglara el pelo
y le hiciera el manicure.
A Tough Guy Walks as if He Was Part of a Guns N´ Roses Videoclip
There are men who walk with pit-bulls and rottweilers to look tough
but a tough man
a really tough guy
lights up a smoke while he drags on the tail of an African crocodile
A tough guy walks as if he was part of a Guns N´ Roses videoclip
at the end of which, he gets to intimidate Axl Rose
A tough man keeps a possum’s nest in his hamster’s wheel
and shaves with a beard of bees
A tough man’s home has a puma on the roof
a shark in the bath tub
and piranhas in the toilet bowl
A tough man’s garage has a cage of eagles
feeding on cats
feeding on canaries
feeding on tarantulas
weaving their webs in every crevice
A tough guy isn’t a tiger in bed
The tiger is on his bed and he pounds him before making love to his mate
and when finished he screams for ten seconds as in “You Could Be Mine”
A tough man wraps himself up with boa skins
while keeping the boa alive
and in Adam-like revenge, forces her to eat apples
When a tough man takes the milk out of the fridge
it’s because the fridge contains a buffalo giving birth
A tough man walks barefoot on his bear-skin rug
though the bear is still wearing it
A tough guy looks at fear straight-in-the-eye
and makes fear tremble with fright
A tough man has …
A tough man’s home has…
A tough man’s garage has …
Hollywood has taught us that toughness of man depends on his possessions
And I do not know what else to say about a tough guys
I do not personally know one
I believe we should all keep away from them
Except Chuck Norris
Because Chuck Norris has Schwarzenegger’s picture in his room
and he was certainly a tough man
in and around Hollywood
He was the toughest governor to walk into a Texas saloon
so that a Mexican girl who worked fifteen hours a day
could keep her family and send money to Guadalajara
a Mexican girl
a really tough one
did his hairdo
and nail clip.
De El álbum púrpura, La Raíz Invertida Editorial, 2021.
Alejandro Cortés G.. Bogotá, 1977. Poeta, narrador, músico, editor, gestor cultural y director de talleres literarios. Autor de los libros Notas de inframundo (Novela, 2010), Pero la sangre sigue fría (Poesía, 2012), Sustancias que nos sobreviven (Poesía, 2015), Del relámpago nacerán luciérnagas (Novela, 2018), Instantáneas dominicales (Poesía, 2019), Almanaque Bristol 1987 (Poesía, 2019), El álbum púrpura (Poesía, 2021) y Todos los diablos tienen sed (Cuento, 2022). Ha sido invitado a encuentros literarios en Suramérica, México, Francia y Canadá. Es músico de Grave Compañía —ensamble de poesía y rock experimental—, director de la Fundación Trilce, coordinador del espacio cultural Trilce en La Galería y del Café literario de la Biblioteca Luis Ángel Arango, en Bogotá.
La composición que ilustra este paisaje de Abisinia fue realizada a partir de una obra del artista español © Juan Carlos Mestre