Juan Sánchez Peláez
Editora de Poesía venezolana: Giordana García Sojo
A 100 años del nacimiento del poeta venezolano Juan Sánchez Peláez (1922-2003) es necesario decir que su obra es fundamental dentro de la literatura de América Latina y el Caribe, y germinal para la formación poética en Venezuela.
…..Sánchez Peláez pasó largas estadías en Chile y Francia, donde participó activamente en las transformaciones culturales de ambos países. En Chile fue miembro fundador del grupo Mandrágora. En Venezuela colaboró en diversos espacios de creación y promoción literaria como la revista Poesía de la Universidad de Carabobo, el suplemento “Papel Literario” del diario El Nacional, la revista Zona Franca, entre otros. En 1976 fue merecedor del Premio Nacional de Literatura, y en 2001 le fue concedido el Doctorado honoris causa por la Universidad de Los Andes.
…..Su obra puede leerse como una línea de tenue curva que cierra sobre sí misma en un círculo perfecto. Desde Elena y los elementos (1951) hasta Aire sobre aire (1989), el poeta ofrece una visión que conjuga la metafísica existencial con una sensualidad de rotunda animalidad. Su poesía manifiesta una visionaria raigambre mística, religada a la búsqueda de asideros verbales para atajar el asombro ante la naturaleza, esa noción suprema que en la voz de Sánchez Peláez explora y redime la consciencia humana.
…..Las letras del continente estarían heridas sin el genio poético de Sánchez Peláez, singular y profuso de influencias posibles –el surrealismo según la crítica– pero especialmente suscitador de nuevos entusiasmos y asombros.
…..Seleccionamos para Abisinia Review siete poemas del maestro, uno de cada uno de sus libros publicados en vida, y todos presentes en la antología bilingüe e ilustrada El alba es el leopardo, editado en homenaje a su centenario, e inaugurando el sello editorial independiente Nila Ediciones.
Profundidad del amor
Las cartas de amor que escribí en mi infancia eran memorias de un futuro paraíso perdido. El rumbo incierto de mi esperanza estaba signado en las colinas musicales de mi país natal. Lo que yo perseguía era la corza frágil, el lebrel efímero, la belleza de la piedra que se convierte en ángel.
Ya no desfallezco ante el mar ahogado de los besos.
Al encuentro de las ciudades:
Por guía los tobillos de una imaginada arquitectura
Por alimento la furia del hijo pródigo
Por antepasados, los parques que sueñan en la nieve, los árboles que incitan a la más grande melancolía, las puertas de oxígeno que estremece la bruma cálida del sur, la mujer fatal cuya espalda se inclina dulcemente en las riberas sombrías.
Yo amo la perla mágica que se esconde en los ojos de los silenciosos, el puñal amargo de los taciturnos.
Mi corazón se hizo barca de la noche y custodia de los
oprimidos.
Mi frente es la arcilla trágica, el cirio mortal de los caídos,
la campana de las tardes de otoño, el velamen dirigido hacia el puerto menos venturoso
o al más desposeído por las ráfagas de la tormenta.
Yo me veo cara al sol, frente a las bahías mediterráneas, voz
que fluye de un césped de pájaros.
Mis cartas de amor no eran cartas de amor sino vísceras de soledad.
Mis cartas de amor fueron secuestradas por los halcones ultramarinos que atraviesan los espejos de la infancia.
Mis cartas de amor son ofrendas de un paraíso de cortesanas.
¿Qué pasará más tarde, por no decir mañana? murmura el viejo decrépito. Quizás la muerte silbe, ante sus ojos encantados, la más bella balada de amor.
De Elena y los elementos (1951)
Profundity of love
The love letters I wrote in my childhood were memoires
of a future love paradise. The uncertain course of my
hope was signed in the musical hills of my
native country. What I pursued was the fragile Roe deer, the ephemeral
greyhound, the beauty of stone that turns into angel.
I no longer faint before the sea drowned of kisses.
To the encounter of cities:
As a guide, the ankles of an imagined architecture
As food, the fury of the prodigal child
As ancestors, the parks that dream in the snow, the
trees that incite to the widest melancholy, the oxygen
doors that shake the warm mist of south, the fatal
woman whose back leans sweetly in the obscure
strands.
I love the magical pearl hiding in the eyes of the
silent, the bitter knife of the taciturn.
My heart became boat of the night and custody of the
oppressed.
My forehead is tragic clay, the deadly candle of the fallen,
the bell of the autumn evenings, the sail oriented towards
the least venturous port
or the most dispossessed one by the gusts of the storm.
I see myself facing the sun, before the Mediterranean bays, voice
flowing from a lawn of birds.
My love letters were kidnapped by the transmarine
hawks crossing the mirrors of childhood.
My love letters are offerings from a paradise
of courtesans.
What will happen later, if not tomorrow? the decrepit
old man whispers. Perhaps death will whistle, before his
enchanted eyes, the most beautiful love song.
Mi animal de costumbre me observa y me vigila.
Mueve su larga cola. Viene hasta mí
A una hora imprecisa.
Me devora todos los días, a cada segundo.
Cuando voy a la oficina, me pregunta:
«¿Por qué trabajas
Justamente
Aquí?»
Y yo le respondo, muy bajo, casi al oído:
Por nada, por nada.
Y como soy supersticioso, toco madera
De repente,
Para que desaparezca.
Estoy ilógicamente desamparado:
De las rodillas para arriba
A lo largo de esta primavera que se inicia
Mi animal de costumbre me roba el sol
Y la claridad fugaz de los transeúntes.
Yo nunca he sido fiel a la luna ni a la lluvia ni a los guijarros de la playa.
Mi animal de costumbre me toma por las muñecas, me seca las lágrimas.
A una hora imprecisa
Baja del cielo.
A una hora imprecisa
Sorbe el humo de mi pobre sopa.
A una hora imprecisa
En que expío mi sed
Pasa con jarras de vino.
A una hora imprecisa
Me matará, recogerá mis huesos
Y ya mis huesos metidos en un gran saco, hará de mí
Un pequeño barco,
Una diminuta burbuja sobre la playa.
Entonces sí
Seré fiel
A la luna
La lluvia
El sol
Y los guijarros de la playa.
Entonces
Persistirá un extraño rumor
En torno al árbol y la víctima;
Persistirá…
Barriendo para siempre
Las rosas,
Las hojas dúctiles
Y el viento.
De Animal de costumbre (1959)
My creature of habit observes and keeps vigil for me.
It wags its long tail. Comes to me
At an undefined time.
It devours me every day, at every second.
When I go to the office, it asks:
«Why do you work
here exactly?»
And I respond to it, very low, almost in its ear:
No reason, no reason.
And as I am superstitious, I knock on wood
Suddenly
For it to disappear.
I am illogically defenseless
From the knees up.
Throughout this initiation of spring
My creature of habit steals the sun
And the fleeting clarity of passersby.
I have never been faithful to the moon, nor to the rain, nor to the pebbles on the beach.
My creature of habit grabs me by the wrists, it dries my tears.
At an undefined time
It descends from the sky.
At an undefined time
It sips steam from my poor soup
At an undefined time
When I atone my thirst
It passes around jugs of wine
At an undefined time
It will kill me, collect my bones
And now with my bones placed in a large sack, it will make a small boat
of me,
A minuscule bubble on the beach.
And so
I will be faithful
To the moon
The rain
The sun
And to the pebbles on the beach.
Then the persistence of a strange rumor
Will clamp itself
Around the tree and the victim;
It will persist…
Forever sweeping
The roses
The ductile leaves
And the wind.
Poema
El que sube y no halla un gran árbol de fuego, sino el hierro de la flor,
la helada flor en su secreto abismo.
¿De la piedra a la candela al chorro dulce que llaman colibrí
qué vocablo me pone en azarosa coyuntura?
Escarbo y sepulto. La escritura de mis pormenores en el puño.
De Filiación oscura (1966)
Poem
Those who rise and no great burning bush was encountered, if not for the iron of the flower, he frozen flower in its secret abyss.
From the stone to the candlestick to the sweet sugar cane called hummingbird
what pun randomly places me in this quandary?
I delve and conceal. The typing’s of my details under my thumb
Lo que no me tiene en cuenta
Lo huidizo y permanente
Se juntan dos cuerpos y el alba es el leopardo.
Mi quebranto
Salta a la faz del juglar;
Si entras o sales
Turba el eco
Una aureola densa;
Si piensas,
Llama en diversas direcciones la tempestad;
Si miras,
Tiembla el fósforo;
Si vivo,
Vivo en la memoria.
Mis piernas desembocan en el callejón sin luz.
Hablo al que fui, ya en mi
regreso.
Sólo me toco al través
con el revés
del ramaje de fuego.
Por ti, mi ausente
Oigo el mar a cinco
pasos de mi corazón,
Y la carne es mi corazón
a quien roza mi antaño.
Si entras o sales,
Vuelve al amor la confidencia del amor.
Dime
Si quiebro con los años
un arcoiris;
Dime
Si la edad madura es fruto vano;
La mujer agita un saco en el aire enrarecido
Baja a la arena y corre en el océano;
Al amanecer,
Por ti,
mi ausente,
La crisálida en forma de rosa
Una rosa de agua pura es la tiniebla.
De Lo huidizo y permanente (1969)
That which does not mind me
The elusive and permanent
Two bodies come together and the dawn is the leopard.
My breakdown
Jumps to the minstrel’s face;
If you enter or exit
A dense aureole
Disturbs the echo;
If you think,
Callings flame diversly directs the storm;
If you look
The phosphorous trembles.
If I live,
I live in memory.
My legs ingress into the lightless alley
In my return, I speak to the one I was
Alone I touch traverse back handed fire branches
For you, my absent one
I hear the sea at five,
steps from my heart
And the flesh is my heart
To whom my yesteryear embraces
If you enter or exit
The confidence of love returns back to love
If with the years I tear a rainbow
If age yields vain fruit
The woman waves a sack in thin air
Descends to the sand and runs into the ocean;
At dawn,
For you,
My absent one.
The chrysalis in the form of a rose
A rose of pure water is the tenebrous
El caballo
El caballo que olisquea mi sombra a ras del suelo apoya su pata delantera entre muchas hojas y abismo. Caballo, fábula de muerte en el viento, mientras la muerte se disipa en blancos páramos. Oh mientras gimo por dentro y río por fuera, el rumor de tu noche negra en mi duermevela a través de luciérnagas.
De Rasgos comunes (1975)
The horse
The horse that sniffs my shadow at the ground supports its front leg among many leaves and abyss. Horse, fable of death in the wind, while death dissipates in white moors. Oh while I moan inside and laugh outside, the sound of your black night in my light sleep through fireflies.
Esta es la abeja: Zumba en el fruto elegido.
Esta vez es mi padre: Me espera en Vigo
(frente a los humanos debe transcurrir y hacerme señas)
he aquí a mi reina que tiene el tamaño del aire y cuya piel y tacto son el tiempo
he aquí a Vicente Gerbasi que trae una lechuza desde el cerro del Ávila
y una ardilla de alquimia
Y este que soy yo: blanco y anciano en mi libro.
De Por cuál causa o nostalgia (1981)
This is the bee: it teases the chosen fruit.
This time it is my father; awaiting me in Vigo
(in front of humans he must elapse and address me)
behold my queen who is the size of air
and whose supple skin and tact are time itself
and here is Vincente Gerbasi who carries with him an owl from the El Avila hill
and a dynamic alchemy
And this that is I: white and ancient in my book.
A Álvaro Mutis
Ápice y cima
a ras de nuestro fin primero
procúranos refugio
y que nutridos por la piel del otoño
se vayan entibiando nuestras casas y animales
y que no haya sino diafanidad
de parte nuestra respecto al hombre o la mujer
ora pro nobis ave de buen augurio,
ora pro nobis en tu niebla finísima y fija
ruega por nosotros
mientras llegan las tardes sin color
y abundan los inviernos.
De Aire sobre aire (1989)
To Álvaro Mutis
Apex and summit
flush with the premier of our finality
procure for us refuge
and that you nourish the skin of autumn
let our entwined houses and animals shed their chill
and let there be nothing but transparency
apart from respecting man or woman
pray for us, blessed bird, pray
for us in your fine and still mist
Supplicate for us
while afternoons arrive colorless
and in winters abound.
Traducción de Raquel Sánchez y Cristina Gálvez Martos
La composición que ilustra este paisaje de Abisinia fue realizada a partir de la obra «Cuentro otro sueño, hablo de esa pesada dificultad para llegar a la palabra»
serie «El pre texto del sueño»
Tinta china negra sobre papel acuarel.
35 cm x 25 cm
del artista © Agustín Iriart