Written by 3:35 am Crítica, Ensayo

En torno a la poética de Lucía Estrada

Yubely Vahos

 

Dentro de la reciente poesía colombiana, la palabra de Lucía Estrada (Medellín, 1980) brilla con una luz misteriosa y profunda. Nos complace traer en el presente número de Abisinia Review un ensayo sobre la obra de Estrada escrito por Yubely Vahos, quien es historiadora y estudiante de Maestría en Comunicaciones de la Universidad de Antioquia.

 

 

 

En el blanco laberinto de la rosa: merodeos en torno a la poética de Lucía Estrada

 

Lucía Estrada aguza el oído. Ha escuchado resuellos, susurros, y balbucidos que gatillan una cadencia. Calla. Percibe en aquellas voces la densidad de sus historias, que arrastran como un sedimento. Estrada busca entre los lomos de un libro, sigue el vestigio del paso de las hormigas, hurga en la alacena. Las voces no provienen de allí. Ella adivina el origen dentro de su propio cuerpo. Son sueños que le presagian lo que ya ha sucedido, mito encarnado en el pulso de su respiración.
…..En la poesía de esta colombiana se corrobora lo que señaló la pensadora María Zambrano. El propósito de Estrada no consiste en volver el rostro a la puerta de la caverna, una vez ha advertido sombras proyectadas en las paredes de su corazón. La autora de Las hijas del espino sabe que aquellas presencias contienen una verdad que escapa a los procedimientos de la razón y les brinda una voz que actualiza sus contornos.
…..Por ello, cuando oímos a Estrada, sabemos que el cuerpo de la poeta se ha expandido para permitir que germine lo que bulle por ser nombrado, para descoser los bordes que la ciñen en el tiempo de sus años, en el espacio que abarcan sus ojos. Sabemos que lo ha hecho con el propósito del profeta o la sacerdotisa: ella nos ofrenda la palabra que la habita, habla a través de la poesía para que el silencio ocupe un lugar de privilegio entre ella y nosotros.
…..A ello se debe que los versos y la prosa de esta poeta colombiana canten en primera persona o se dirijan a ti, a cada lector en particular, para que se abra a misterios atemporales. Pero dejemos que sea Estrada misma quien nos muestre, en cuatro de sus libros los caminos que ha transitado su poesía, su viaje a través de la rosa del lenguaje.
…..En Maiastra, el Epígrafe de Olga Orozco nos anuncia que la poeta se valdrá de una suerte de orfismo para cruzar, llena de incertidumbre, el espejo de Alicia. Una vez al otro lado, Estrada halla un espacio de presencias huidizas que solo revelan jirones de sí en la imaginación de la autora: «No es un lugar que puedas llegar a conocer, no totalmente, no con la simetría que tu ojo exige, no con la memoria que da seguridad, con la que podrías ir hablando de tu aldea imaginaria», nos advierte en uno de sus poemas. Allí las imágenes que la poeta capta y crea carecen de la permanencia de la piedra y el hueso. Son del orden del trueno, la música, el presentimiento de demonios y ángeles, la búsqueda de la forma de un dios que ya no existe. Están y justo cuando la autora empieza a confiar en su presencia, se transmutan, la dejan con la mirada inquieta.
…..Los lugares que habita la poeta en Las hijas del espino son más íntimos. El cuarto, el jardín, la cocina. Espacios en los que las mujeres albergan su soledad y sus preguntas más acuciantes. Los poemas de esta obra son testimonios del desdoblamiento emprendido por Estrada. Ella perpetúa la voz de hitos del legado griego, artistas y parejas de hombres artistas. Nos fuerza a habitar la rebeldía dolorosa de aquellas que empuñaron su destino y lo descubrieron hiriente, a sentir la incertidumbre que habitó en esas mujeres que vislumbraron con estupor las sombras que iban cerniéndose sobre ellas —en las que se sintieron presas—, a vislumbrar la necesidad de nombrar la dosis de silencio y miedo que puebla el amor.
…..Porque el amor es el hilo conductor de muchos de estos poemas. El amor como soledad de dos cuerpos que se palpan, el amor como herida que se procura mantener abierta, el amor como urgencia de proteger al amado de aquellos males que lo acechan. «Hoy he descubierto mi temor a la locura. // Hoy he comprendido el temblor de tu mano al encender la lámpara. // Está entre nosotros / y tú lo sabes. / Su risa gotea en las paredes, / su respiración empaña el espejo / en el que sueles escribir / para conjurar el espanto», escribe la poeta al darle voz a María Dmitrievna Isaiev. Sin embargo, tales piezas nombradas con voz de mujer no son ni biografías ni glosas. Cada protagonista se torna en una excusa para hablar de las verdades que persisten en todas las edades y en todas las mujeres.
…..El filósofo Jean Bollack afirma a propósito de Paul Celan que sus poemas hablan casi exclusivamente del lenguaje. Esta afirmación puede hacerse extensiva a gran parte de la poesía contemporánea, y vale para los poemas de Estrada correspondientes a La noche en el espejo, así como para gran parte de su otra producción. Puede decirse con Bollack que su poesía saca la fuerza vital de esa auto-reflexividad en torno a los medios que emplea, de ese constante volver sobre sí misma. De ahí extrae también, siguiendo al filósofo, ese carácter experimental que sitúa al poeta en la posición de un observador de sus propias producciones, en el espacio creado por la lengua del poema.
…..Así pues, el lugar que ella visita en esos poemas es la lengua poética. Reflexiona sobre la sonoridad del lenguaje que, desde su perspectiva es comparable con el tañido de unas campanas que hace visible cada cosa y torna posible rescatar alguna palabra para perpetuar su presencia. La poeta nos recuerda que tanto en la realidad como en el sueño todo existe para nosotros solo cuando es nombrado desde nuestra propia boca.
…..Además, en su poética la escritura es un camino en el que cada paso ganado a la muerte es un despojarse de la casa que queda atrás, y alimentar a una jauría de perros con el cuerpo. Todo aquello para encontrar una palabra certera y, nuevamente el silencio que alarga la senda y nos impele a reemprender la marcha.
…..A pesar del carácter fugaz e incierto que Estrada le otorga al lenguaje, la poeta no asume respecto a él un pesimismo que podría conducirla a una honda duda de su fuerza para comunicar el mundo de las formas concretas con los espacios del sueño, la memoria y el deseo, similar a la que leemos en Alejandra Pizarnik cuando escribe: «no / las palabras / no hacen el amor / hacen la ausencia / ¿si digo agua ¿beberé? / ¿si digo pan ¿comeré?» Lucía Estrada cree que las palabras son vasos comunicantes en la medida que el poeta logre ser la columna que anude los reinos de la realidad y la poesía. De allí que afirme: «Sólo un gesto para saber que todo se corresponde, / que no estamos en orillas opuestas. / Que todo nos viene de nombrarlo, / de creer en lo que no se conoce, / en lo que juzgamos niebla y abismo».
…..Esta reflexión se abrió con los poemas en prosa de Maiastra y ahora se posa sobre otro grupo de poemas escritos de acuerdo con ese género: los que corresponden al libro Katábasis. Sin embargo, ese último poemario en prosa les da la vuelta a las imágenes de Maiastra: allí los peldaños, la quilla de un barco o el lento ejercicio de la luz en un cuarto sustituyen las presencias fantásticas del trueno o los súcubos. Ello no significa que la autora renuncie al misterio en cuanto forma privilegiada de expresión, ni a su inquietud por el lenguaje y el pasado que se torna presente. Significa que la operación es distinta: si Maiastra testimonia el viaje por ese reino al que la poeta es llevada entre las tormentas fabulosas de una noche que no ha sucedido nunca, pero late en el rostro oculto de las cosas, Katábasis habla de un descenso a las herrumbrosas raíces que sostienen el mundo de la que canta su experiencia abisal. Sin duda, Estrada emplea otro cariz para indagar en el lenguaje poético y halla respuestas distintas.
…..Hay en Katábasis la certeza de que existen sentimientos y lugares que permanecen: la voluntad de aventurarse a lo que siempre ha sido temido, la casa que se adivina del otro lado del humo que nos separa de Ítaca. El trasegar de cada ser humano es —para Estrada— repetir palabras, días, gestos. Volver a visitar la misma incertidumbre respecto al amor y al decir, y descubrir pequeñas verdades de cuya antigüedad nos percatamos solo cuando las tenemos en frente. Es también un camino circular que nos deja en el punto de partida. En sus palabras: «Cavar hasta volver al principio, hasta no recordar nada, hasta ser sólo un hueso, una piedra, un fragmento de algo que una vez fue, y ya no importa». no sobra escribirlo. Lucía Estrada desconfía de la existencia de la historia de cada hombre como un continuo ir hacia adelante, noción que se instauró a partir del siglo XIX, cuando la investigación del pasado y la existencia del ser humano se creyeron inexorablemente impulsadas por el progreso.
…..La autora concibe la historia como el acto de resistir los mismos envites, como una casa que, para no precipitarse sobre nuestras cabezas se afinca en el pasado.
…..La experiencia vivida y la que se configura en sus lecturas hacen la voz del poeta. Lo sabemos. Sin embargo, rara vez nos es dado fisgonear el oficio sedentario e introspectivo del escritor que lee. Lucía Estrada nos ofrece un atisbo de esa faceta suya en el ensayo Rilke o la pregunta por el ángel. El asombro con que ella se sumerge en las Elegías de Duino resulta tan elocuente sobre sus búsquedas como su poesía. Para la autora, el ángel que preside la escritura lenta de aquel libro del poeta alemán, representa el necesario silencio que precede la escritura cuando quien la acomete se arroba la misión de descifrar la existencia. Y el descubrirse del ángel fuerza al poeta a asumir el tiempo y las cosas en cuanto totalidad. Así mismo, la presencia sostenida de ese ser exige del poeta bucear más profundo en el lenguaje para quebrar la corteza de la realidad y aceptar el riesgo de perderse, de volver a empezar. Ella reconoce su afinidad con las obsesiones rilkeanas: el amor como misterio; la vida y la muerte en cuanto vasos comunicantes; la naturaleza que lleva a lo primigenio y la palabra como puente para acceder a lo invisible. En suma, ella hace de su poesía un espacio de lo simbólico y se apropia, actualizándolo del ideal del escritor romántico.
…..No sorprende entonces que la poesía de esta mujer exija un lector atento a sus signos, ser leída dos veces para captar no solo los contornos de su arquitectura, sino sus sentidos. Estrada camina sobre una delicada cuerda tendida entre el hermetismo y la elocuencia. En la primera lectura, su poesía se nos aparece más inclinada del lado de lo oscuro, y tememos que la autora haya olvidado tender un puente para que los lectores puedan llegar hasta sus letras. En ocasiones sus símbolos están hasta tal punto apropiados e insuflados de otro sentido que, sin alguna noción de su obra previa, la comunicación entre autora y lector no ocurre plenamente. Sin embargo, cuando la comunión ha sucedido, su obra se nos revela sólida y comprometida con la renovación de la tradición poética nacional.

 

 

Yubely Vahos (Cisneros, Antioquia, 1996). Historiadora y estudiante de la Maestría en Comunicaciones de la Universidad de Antioquia. Obtuvo el premio Mujer Joven Talento de Medellín, Modalidad Ciencias Sociales. Poemas suyos han aparecido en antologías como Al amparo del Bosque, antología de poesía homoafectiva (Idartes, 2020) y Contra molinos de viento Antología Internacional “POESÍA FUSIÓN” (Subsecretaría de Turismo, Cultura y Deportes de la Municipalidad de la Ciudad de San Luis, 2020). Sus ensayos han sido publicados en revistas académicas y culturales, como Trashumante, Revista Universidad de Antioquia y Literariedad. Es autora de La toma: el M-19 en la Embajada de República Dominicana, 1980 (La Carreta, 2020). Fotografía de la poeta: Ana María Bustamante.

La composición que ilustra este paisaje de Abisinia fue realizada a partir de la fotografía «La anunciación» del artista © Juan Sebastián

 

año 2 ǀ núm. 12 ǀ julio – agosto  2022
Etiquetas: , , , , , , , , , , , , , Last modified: julio 24, 2022

Morada al sur / Casa al sud

AUTOR

Aurelio Arturo

ISBN

978-9587-39472-6

PRECIO COLOMBIA

COL $100.000

PRECIO ARGENTINA

El cuidador de rebaños
El pastor amoroso

AUTOR

Fernando Pessoa /Alberto Caeiro

ISBN

978-631-90088-6-9

PRECIO COLOMBIA

COL $60.000

PRECIO ARGENTINA

Estrellas de mar sobre una playa

Los poemas de la pandemia

AUTOR

Margaret Randall

 

ISBN

978-958-52793-1-5

PRECIO ARGENTINA

ARS $20.000

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

La sal de la locura

Le Sel de la folie

AUTOR

Fredy Yezzed

ISBN

978-1-950474-12-7

PRECIO ARGENTINA

Agotado

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

PRECIO AMAZON

Pronto Disponible

 

Carta de las mujeres de este país

Letter from the Women of this Country

AUTOR

Fredy Yezzed

ISBN

978-1-950474-09-7

PRECIO ARGENTINA

ARS $18.000

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

PRECIO AMAZON

Pronto Disponible

 

La canción que me salva

The Song that Saves Me

AUTOR

Sergio Geese

ISBN

978-1-950474-03-5

PRECIO ARGENTINA

Agotado

En este asombro, en este llueve

Antología poética 1983-2016

AUTOR

Hugo Mujica

ISBN

978-1-950474-15-8

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

El país de las palabras rotas

The Land of Broken Words

AUTOR

Juan Esteban Londoño

ISBN

978-1-950474-05-9

PRECIO ARGENTINA

Agotado

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

Las semillas del Muntú

AUTOR

Ashanti Dinah

ISBN

978-1-950474-22-6

PRECIO ARGENTINA

Agotado

PRECIO COLOMBIA

Agotado

Paracaidistas de Checoslovaquia

AUTOR

Eduardo Bechara Navratilova

ISBN

978-1-950474-25-7

PRECIO ARGENTINA

AR $10.000

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

PRECIO AMAZON

Pronto Disponible

Este permanecer en la tierra

AUTOR

Angélica Hoyos Guzmán

 

ISBN

978-1-950474-82-0

PRECIO ARGENTINA

ARS $10.000

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

La fugacidad del instante

AUTOR

Miguel Falquez-Certain

 

ISBN

978-958-52674-5-9

PRECIO ARGENTINA

Pronto Disponible

PRECIO COLOMBIA

COP 100,000

PRECIO AMAZON

Pronto Disponible

 

Mudar el mundo

AUTOR

Ana Gandini

ISBN

978-987-86-6012-7

PRECIO ARGENTINA

ARS $10.000

El guardián de la colmena

AUTOR

Leandro Frígoli

ISBN

978-987-88-0285-5

PRECIO ARGENTINA

ARS $10.000

El diario inédito del filósofo
vienés Ludwig Wittgenstein

Le Journal Inédit Du PhilosopheViennois Ludwing Wittgenstein

AUTOR

Fredy Yezzed

ISBN

978-1-950474-10-3

PRECIO ARGENTINA

ARS $16.000

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

PRECIO AMAZON

Pronto Disponible

 

Fragmentos fantásticos

AUTOR

Miguel Ángel Bustos

ISBN

978-958-52096-8-8

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

El bostezo de la mosca azul

Antología poética 1968-2019

AUTOR

Álvaro Miranda

ISBN

978-958-52793-5-3

PRECIO ARGENTINA

Agotado

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

Geografía de los amantes del Sur

AUTOR

Mónica Viviana Mora

ISBN

978-958-53033-2-4

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

Geografía de los amantes del Sur

AUTOR

Mónica Viviana Mora

ISBN

978-958-53033-2-4

PRECIO COLOMBIA

COP 35,000

Yo vengo a ofrecer mi poema

Antología de resistencia

SELECCIÓN & CURADURÍA 

Fredy Yezzed, Stefhany Rojas Wagner

y Eduardo Bechara Navratilova

ISBN

978-958-53033-3-1

PRECIO ARGERTINA 

AR $20.000

PRECIO COLOMBIA

COP 80,000

El inmortal

AUTOR

John Galán Casanova

ISBN

978-95853-39439

PRECIO COLOMBIA

COL 35.000

 

Las voces de la tierra

AUTOR

Yanet Vargas Muñoz

ISBN

978-958-49-3124-5

PRECIO COLOMBIA

COL 35.000

 

Lo que se desvanece

AUTOR

Luis Camilo Dorado Ramírez

ISBN

978-958-53394-8-0

PRECIO COLOMBIA

COL 35.000

 

Por el ojo del pincel

AUTOR

Mónica Fazzini

 

ISBN

978-987-86-5317-4

PRECIO ARGENTINA

ARS $10.000